Les Sociétés, la Guerre, la Paix

La soif de l'or et le goût du sang... Une fresque en cinq volumes qui permet à Harriet et Mata de déployer la richesse de leurs talents dans cette évocation tout en nuances de la conquête de l'Amérique du Sud et de la destruction de ses fascinantes civilisations.

Una Edad Media indeterminada, un reino isleño de fábula donde conviven elementos mágicos con apuntes cristianos, y donde la pura épica alterna con estéticas y villanos que parecen salidos de los cuentos de hadas, con animalitos graciosos inexistentes y brujos crueles que reconocen su deuda con el diablo. El dibujante de Thorgal, más suelto y caricaturesco que en la serie que le dio justa y merecida fama, se explaya a gusto con los paisajes, las armaduras, ese mar que vive como si lo hubiera navegado de punta a punta, y en la catadura moral de unos personajes que expresan quiénes son y cómo piensan nada más entrar en escena.

La amistad entre dos jóvenes artistas, Pablo Ruiz Picasso y Carles Casagemas, en la Barcelona, Málaga y el París de principios del siglo XX es la idea sobre la que gira La vida, la nueva obra de Tyto Alba, en esta ocasión de nuevo como autor completo. Ambos, Picasso y Casagemas, se conocen en un café de la Barcelona bohemia y, atraídos por el talento y la personalidad del otro, acabarán por ser inseparables, formando una de las relaciones de amistad entre artistas más interesantes y misteriosas de la historia.

París en 1897, sus monumentos, sus luces, sus bailes populares… y sus Apaches, jóvenes delincuentes que recorren las calles y asustan a los ciudadanos honrados…
Apenas salida de la adolescencia, Amélie sueña con una vida diferente de la extenuante que han conocido sus padres. Pero el París de los matones y los chulos ofrece pocas alternativas a una chica tan guapa: la calle y los "servicios" por unos pocos francos. Al menos, claro, que aparezca el príncipe azul, con el pañuelo al cuello y la navaja en la mano.

El mito de Perseo y Medusa encierra la sabiduría de cómo enfrentarse a la muerte que te petrifica con solo mirarla a los ojos. Los mitos son más que un relato de aventuras y superpoderes. En tiempos de pandemia conviene cortarle la cabeza al mal que nos acecha con la mirada.