Philippe Tétart

De la contraportada: 1932. Alemania pasa por una crisis sin precedentes. Mi padre, al igual que numerosos compatriotas, veía en Hitler al único hombre capaz de enderezar la situación. Yo lo desaprobaba en silencio… Fue en esa época que Katrina vino a vivir frente a nuestra casa. Descubrí en mí sentimientos desconocidos hasta entonces… Las cosas habrían podido ser sencillas de no ser pro mi timidez y, sobre todo, por la llegada de los nazis al poder…

En Estronggylé, la redonda, la vida se desarrolla como en los tiempos antiguos. La madre Creta está lejos. Un drama se prepara.
Los barcos ya no vienen al puerto. la mar ya no es protectora. La vida de la isla está en juego.

Dans une ambiance de jeu de séduction, au milieu du 19ème , la belle Éva se retrouve témoin d’un meurtre dont elle risque d’être rapidement accusée. Lors de sa fuite, la belle « Dame aux Camélias », Marie Duplessis, la récupère et lui donne une couverture : elle sera sa cousine mais également « courtisane »... comme elle. Éva devient alors une perle convoitée parmi les prostituées de luxe au sein mêmes des milieux littéraires les plus prisés. A ses côtés, elle rencontre Sue, Delacroix, Chopin, Balzac, Mérimée... Mais aussi Vidocq qui recherche l'assassin du Comte de Brogly.

Promoción editorial: EL CÓMIC QUE NARRA LA APASIONANTE VIDA DEL CREADOR DE BLAKE Y MORTIMER. Edgar P. Jacobs fue, por supuesto, el creador de Blake y Mortimer, dos personajes que dieron la vuelta al mundo. Pero también fue muchas cosas más: un apasionado de la Antigüedad, un cantante de ópera, un artista brillante, un buen amigo y un hombre enamorado. Esta es su historia.

Cuando la vida deja de sonreírle a Philippe, cuando pierde sucesivamente a su mujer, su trabajo y su techo, este se hunde. O lo haría si no fuera por algunos acontecimientos afortunados y el afecto de los demás.
Philippe puede inventarse entonces una nueva profesión, conocer a otras personas, descubrir nuevos paisajes que alimentarán su formidable apetito por la vida. El camino es accidentado, pero a lo largo del mismo puede emborracharse con palabras, soñar con vinos, cultivar la amistad y volver a encontrar el amor: rehacer su vida.
Y aunque a veces nos peleamos, lastimamos o separamos, la sonrisa nunca desaparece del todo.

Mientras Lady Elza busca desesperadamente un apartamento con capacidad para sus 400 pares de zapatos, encuentra una oferta de oro. Un magnífico piso que perteneció a Coco Brown: una periodista cazadora de primicias muy controvertida que fue encontrada asesinada con el cuerpo acribillado a balazos. ¡Suficiente para despertar la curiosidad de nuestra bella inglesa! Excepto que hay un lobo: todos los compradores anteriores de la propiedad también han desaparecido en circunstancias igualmente trágicas…

J.B. Bone est de ceux qui font la légende. L'un des derniers, sans doute, à arpenter les pistes d'un vieil Ouest encore mal civilisé... Pas précisément un ange, ce J.B. Bone : buveur invétéré, pilleur de banques, tueur de femmes et d'enfants, il mène son existence violente et solitaire vers son inévitable crépuscule. Sa seule valeur, J.B. Bone la porte sur sa tête : une tête mise à prix, que la pire racaille ira se disputer jusqu'aux portes de l'enfer.

De la contraportada: 1932. Alemania pasa por una crisis sin precedentes. Mi padre, al igual que numerosos compatriotas, veía en Hitler al único hombre capaz de enderezar la situación. Yo lo desaprobaba en silencio… Fue en esa época que Katrina vino a vivir frente a nuestra casa. Descubrí en mí sentimientos desconocidos hasta entonces… Las cosas habrían podido ser sencillas de no ser pro mi timidez y, sobre todo, por la llegada de los nazis al poder…

El apuesto e impetuoso Nadau, ebanista de profesión, es sin embargo uno de los mejores espadachines del país… ¿no se dice que es hijo del legendario d'Artagnan? Rápido y desprejuiciado, no se anda con rodeos: como ama a dos hermanas, a las que quiere…
¡Se casa con los dos!

Déjame contarte, hijo, la historia de un mercenario que vivía en tiempos antiguos y sombríos donde el hombre era un lobo para el hombre y donde sólo la fuerza y la astucia hacían la ley. Este mercenario no tenía más que un camino, el de vagar sin fin, y sólo un destino, el de la espada. Llevaba su nombre como se lleva un escudo contra su corazón. Se llamaba Ívor.